miércoles, 15 de agosto de 2012


NUEVA ETAPA

Quiero iniciar una nueva etapa del blog y para ello lo primero que he llevado a cabo es la exportación de todos los artículos de blogger a wordpress. 

En  pocos días continuaré con la publicación de nuevas entradas en:      violinsantacatalina.wordpress.com

jueves, 11 de agosto de 2011

OTRO
MOSAICO THEOPHOROUMENE

Mosaico Theophoroumene. Oficina de excavaciones de Pompeya 17735.
Encontrado en la zona del Vesubio.

     La primera publicación de este mosaico fue la que realizó Stefani (Stefani. Grete. 2000 "Mosaici sconosciuti dall'area vesuviana" En las actas de la VI reunión de la Asociación italiana para el estudio y la conservación del mosaico, 279-90. Rávena: Edizioni del Girazole) y lo coloca en el segundo estilo, fechado tradicionalmente en el I siglo a.C.

     Desde Kisamos, en la isla de Creta, llega el capítulo más reciente en la tradición iconográfica de la Theophoroumene, un mosaico inscrito que será publicado por Stavroula Markoulaki (Markoulaki, Christoudoulakos, y Phragkonikolaki 2004, 370-71). Sus rasgos estilísticos sugieren una fecha tardía, posiblemente en el siglo cuarto o quinto. Dado que las estatuillas de Mirina son, posiblemente, un poco anteriores que el mosaico de Dioscórides, que está fechado a finales del siglo II a.C., nuestro registro visual sobre la Theophoroumene abarca casi seis siglos, proporcionando así un excelente ejemplo de lo que Green and Steberg (MNC3 1.85) llama la "muy tenaz" tradición iconográfica de la Theophoroumene.

     Stefani nos cuenta que el mosaico, al tener un fondo diferente, aparentemente un templo, mostraría otro momento de la escena, que tiene lugar después de la escena de Dioscórides (que Stefani afirma que reproduce una procesión).

     En cuanto a la transmisión textual que nos ha llegado sobre la Theophoroumene de Menandro, podemos decir que sólo uno o posiblemente dos papiros se le pueden atribuir (PSI 1280 y 1480).

     PSI 1280: Fechado a finales del primero o inicios del segundo siglo, conserva dos columnas de texto más o menos dañadas, atribuidas a la Theophoroumene con los siguientes argumentos: además de referencias a una chica que "está divínamente poseída", contiene los mismos nombres inscritos en el mosaico de Mitilene, Lysias y casi con toda seguridad Kleinias, así como una antigua forma léxica verbal citada sólo por Menandro (parasta). Se está realizando una prueba musical para determinar si la chica que da nombre a la obra, está realmente poseída o simplemente lo finge.

     PSI 1480: Este segundo papiro atribuido a la Theophoroumene, data del siglo I a.C. o del siglo I y conserva un himno a Cibeles con líneas cantadas y algunas líneas de diálogo cómico normal. Handley (Handley, Eric W. 1969. "Notes on the Theophoroumene of Menander" BICS 16:88-101), entre otras posibilidades, sugiere que este texto es la respuesta de la chica poseída, a la escena de la prueba musical de la obra.

     El tema de esta escena puede haber sido un factor clave para su supervivencia. Esta es una escena de entretenimiento, con actores que hacen música: es una buena escena para las áreas domésticas dedicadas al entretenimiento y festividades. Algunos espectadores podrían haber sido capaces de identificarla como la escena clave de la Theophoroumene de Menandro sin el acompañamiento de una etiqueta, pero para muchos otros, ésto podría haber sido simplemente una escena de tres músicos con coronas, una aulista y dos hombres músicos tocando dos "extraños" instrumentos, el pandero y los platillos, que se asocian generalmente con las mujeres. Y puede que no sea una coincidencia, que el principal interés del fragmento dañado y actualizado (puesto al día) de Pompeya sea, de hecho, el motivo musical de esta ilustración.

sábado, 30 de abril de 2011

LA OBRA THEOPHOROUMENE
DE MENANDRO

     Seguimos con la serie dedicada a los Mosaicos, Pinturas y Terracotas sobre la Theophoroumene de Menandro.


     En un artículo sobre la supervivencia de la Theophoroumene de Menandro, en los periodos helenístico y romano (Menander’s Theophoroumene between Greece and Rome) escrito por la Dra. Sebastiana Nervegna (Universidad de Sydney, Australia, especializada en teatro romano y griego), nos habla principalmente de una pintura fragmentada (Ufficio Scavi di Pompei 20545) y un mosaico fragmentado igualmente, que se encontraban en los almacenes de las oficinas de excavaciones de Pompeya, Ercolano y Estabia. Toda la información de este artículo y el siguiente estará basado en la información que aporta el artículo de la Dra. Nervegna.


     Reproduce un fragmento de la escena principal de la Theophoroumene de Menandro y proporciona nuevas pruebas e inicio del proceso de manipulación del modelo helenístico de esta ilustración. La flauta gigante que reproduce se puede identificar mejor como una tibia romana que como un aulos griego.

     De todas las escenas del drama griego que se identifican con seguridad, la Theophoroumene es una de las que está más ampliamente ilustrada, sino es la que más.

     Esta pintura pertenece a un grupo de más de 150 pinturas murales dañadas, que se pusieron a disposición del público en general, por primera vez, en una exposición celebrada en Turín en 1997 y publicada simultáneamente en el catálogo de la exposición (Mastroroberto, Marisa. 1997. “60: Musici ambulanti.” In Pompeii Picta Fragmenta, 107–8. Turín: Allemandi).

     Mastroroberto describe brevemente nuestra pintura mural, y la coloca en el tercer estilo, que tradicionalmente se fecha entre últimos del siglo I a.C. y mediados del siglo I, e identifica el tema como “músicos errantes”:
    
“Este pequeño panel conserva parte de una escena de inspiración teatral con dos músicos errantes que están haciendo música... El personaje de la izquierda es un panderero: él es robusto y fuerte, ya que produce el ritmo melancólico del pandero que está sacudiendo con su mano izquierda. Tiene las características vulgares y sin refinar de la máscara que lleva puesta – características que son típicas de los personajes de obras sátiras. Si bien los gestos del personaje masculino son libres e imponentes, los de la mujer aulista de la derecha son discretos. El tamaño y la máscara de la aulista – rasgos delicados, el cabello suelto sobre los hombros, expresión absorta por la música y afectada por el esfuerzo de soplar – indica las características de un personaje que necesita proporciones físicas femeninas para vestirse. El grupo de baile que en la Nueva Comedia toma el lugar del coro de la Comedia Antigua, estuvo generalmente compuesto por 4 personas: el panderero y la aulista, como en nuestro panel, y el platillero, todos con una máscara y seguidos por un niño o un enano. Por lo general son representados ante el muro de una casa o junto a una puerta. Ellos son los metragyrti, músicos errantes que adoran a Cibeles... Las escenas famosas de inspiración teatral, reproducidas en pinturas y mosaicos, se derivan de pinturas fechadas en el siglo III a. C. Entre ellas, las dos emblemáticas de la Villa de Cicerone en Pompeya, ahora en el Museo Arqueológico Nacional de Nápoles, realizado por Dioscórides de Samos... La misma escena representada en uno de los mosaicos de Dioscórides ... puede se identificada en una pintura mural del 4º estilo en Estabia.”

     Podemos hacer una serie de correcciones a la nota de Mastroroberto, que es confusa y además confunde. Primero, este fragmento no reproduce “una escena de inspiración teatral”: reproduce una escena teatral, al igual que los otros monumentos que cita Matroroberto, los dos mosaicos firmados por Dioscórides de Samos y la pintura mural de Estabia que reproduce uno de los mosaicos de Dioscórides. Segundo, Mastroroberto asocia estas figuras con un “grupo de baile” que ella afirma haber sustituido los coros de la Antigua Comedia en la Nueva Comedia. No estoy segura de lo que este “grupo de baile” sería o debería ser; si se identifica con el coro de la Nueva Comedia, se observa que, a juzgar por las pocas referencias sobre los miembros del coro en las obras de Menandro, los coros de la Nueva Comedia se componen por fiesteros ebrios (utiliza la expresión “tipsy male revellers” que se puede entender como fiesteros o parranderos bebidos), a veces denominados como “los hombre jóvenes”.


     El hecho de que nuestra aulista lleve una máscara, una máscara femenina, excluye su identificación con el aulista oficial que acompañó a las representaciones dramáticas: se trata de un actor interpretando el papel de una hetaira (dama de compañía/prostituta), o más bien pretendiendo interpretar, a una flautista. La suposición general y probable, es que los personajes en la comedia, simplemente fingían tocar, mientras la música era proporcionada por el aulista oficial. El uso de una máscara de cabeza completa hace particularmente difícil tocar la flauta, y los actores, al menos la mayoría de ellos, no necesariamente tendrían esa habilidad musical.

     Hasta aquí la primera parte del artículo de la Dra. Nervegna, donde nos ha descubierto los fragmentos de otra copia de la obra Theophoroumene, y nos ha introducido en las modificaciones de adaptación, desde la pintura original griega a los mosaicos y pinturas romanas.

     En el siguiente artículo veremos un análisis sobre fragmentos de otro mosaico de reciente aparición.